Le Corbusier dictó los cincos puntos para una nueva arquitectura, entre ellos la fachada libre, pero también apreciada en este caso la ventana corrida, como un elemento continuo de fachada, permitiendo la máxima entrada de luz. Además, explicada más adelante, se observa la azotea jardín, mejor dicho en plural, ya que la sucesión de las cubiertas de cada una de las plantas proporciona terrazas para las plantas superiores. Si que podríamos echar de menos en estos puntos, la notoria ausencia de los pilotis, ya que está asentada directamente sobre la naturaleza, clara referencia a una arquitectura orgánica, en la que se quiere relacionar esta con la naturaleza y con el hombre. A raiz de esto, por la distribución de las plantas, se quiso dar a cada una de ellas su utilidad, ya que además de una construcción habitable, se situaría en la misma la redacción de la revista Son de Armadans. 

Se muestra en la vista con distintos colores los puntos de Le Corbusier. Ventana corrida, fachada libre y azotea jardín.